En los países más avanzados, el estreñimiento es uno de los mayores problemas digestivos a los que se enfrenta gran parte de la población. En España, por ejemplo, un 20% de los adultos, y sobre todo mujeres, padecen estreñimiento crónico.
Las molestias y el malestar que conlleva esta dolencia impactan directamente sobre la calidad de vida de estas personas, alterando su día a día, hasta el punto de que, en casos extremos, su salud mental también se ve afectada.
De entre los muchos remedios que existen para combatir el estreñimiento, ya sean naturales o farmacológicos, el café cuenta con una amplia aceptación, especialmente por las mañanas. Y es que esta bebida tan popular es conocida por su efecto laxante. Pero, ¿realmente es una ayuda eficaz para favorecer el tránsito intestinal y luchar contra el estreñimiento?
El efecto laxante del café
Hace ya algunos años, uno de los numerosos estudios a los que el café se ve sometido reveló una de sus muchas propiedades: estimula la motilidad intestinal. Los investigadores comprobaron que tras ingerir una taza de café, tanto los músculos del colon como los rectales aumentaban su actividad. Esto significa que el café puede actuar como laxante, facilitando la evacuación intestinal.
De hecho, muchas personas que sufren estreñimiento notan este efecto, sobre todo si toman el café por las mañanas.
Por otro lado, otros investigadores atribuyen esta motilidad matutina al azúcar, los edulcorantes o los lácteos que se le añaden al café. O simplemente porque se trata de un líquido caliente que, como se sabe, contribuye al movimiento del intestino.
Lo cierto es que los científicos aún desconocen porqué el café produce este efecto laxante. Lo que sí parecen tener claro es que la cafeína no es la responsable, ya que se han conseguido los mismos resultados con el café descafeinado.
Un estudio revela que ambas variedades de café activan la producción de gastrina, una hormona que colabora en el proceso de la digestión y que, entre otras cosas, ayuda a que los alimentos se muevan por todo el tracto digestivo hasta llegar al recto. Además, otro factor que apoya este hecho tiene que ver con esas otras bebidas que contienen cafeína, como los refrescos de cola o las bebidas energéticas. Ninguna de ellas ha demostrado tener poder laxante.
Entonces, ¿quién puede ser el culpable? Son varios los factores capaces de estimular el movimiento intestinal. Los más relevantes son la alimentación y el estilo de vida. En cuanto al café, todo apunta a uno de los cientos de compuestos químicos que contiene: el ácido clorogénico. Al provocar una elevada producción de ácidos gástricos, la acidez en el estómago aumenta y este se vacía más rápidamente. Al mismo tiempo, se activa el movimiento de los músculos de la pared gastrointestinal, facilitando la evacuación.
Sin embargo, lo que hace que el café tenga propiedades laxantes es un mecanismo bastante complejo y son necesarios más estudios para revelar sus secretos.
Un efecto indeseado del café
Si padeces estreñimiento o eres propenso a sufrirlo, te conviene saber que el café, además de ser una bebida estimulante también es ligeramente diurética. Por lo tanto, beber demasiadas tazas de café no solo podría provocar diarrea en personas sin problemas intestinales, sino que puede empeorar un cuadro de estreñimiento.
Tomar elevadas dosis de café aumentará la frecuencia con la que iremos a orinar, provocando deshidratación y un endurecimiento de las heces. Por eso, las personas con estreñimiento crónico deberían limitar el consumo de café para no agravar su problema.
De esto deducimos que no es buena idea depender del café para solucionar el estreñimiento. Además, con el tiempo se alteraría el ritmo natural del sistema digestivo, dando lugar a mayores dificultades.
Tampoco hay que olvidar, que la tolerancia al café varía mucho de una persona a otra. Mientras que unos presentan molestias digestivas con una sola taza, otros toleran altas dosis sin problemas. Cada cual debe determinar qué cantidad de café es la idónea sin que perjudique a su organismo. Aún y así, lo recomendable, según los nutricionistas, es no rebasar las tres tazas diarias.
Cómo prevenir el estreñimiento
Para muchas personas ir al baño es un suplicio, pero realizar algunos cambios en su estilo de vida puede suponer una mejora importante.
Aunque el estreñimiento puede aparecer como consecuencia de tomar algunos medicamentos (suplementos de hierro, por ejemplo) o de ciertas enfermedades, la Federación Española del Aparato Digestivo (FEAD), indica que las principales causas del estreñimiento son el sedentarismo y una dieta pobre en fibra y líquidos. ¿Las razones?
Estar sentado durante gran parte del día hace que el tránsito intestinal sea más lento y que la masa fecal tenga dificultades para recorrer el intestino hasta llegar al recto. Todo ello empeora al disminuir también la sensación de sed, con lo que bebemos menos líquido y las heces se endurecen.
En cuanto a la alimentación, uno de los factores claves para asegurar la buena salud digestiva y una correcta motilidad intestinal, es llevar una dieta equilibrada. Antes de recurrir a productos farmacéuticos, probemos aquellos alimentos que ya tienen propiedades laxantes. Para ello, debemos asegurarnos de ingerir suficiente fibra, que encontraremos en frutas, verduras, legumbres, frutos secos y productos integrales. Además, no debemos olvidar la hidratación. Para que la fibra regule el tránsito intestinal debe complementarse con suficiente líquido. Por eso es necesario beber, sobre todo, agua.
Ahora bien, ingerir demasiada fibra puede bloquear el intestino y provocar el efecto contrario. Tampoco debemos abusar de los laxantes, y menos sin supervisión médica, aunque sean naturales. No solo pueden empeorar el estreñimiento, sino causar otros problemas en el organismo.
Por lo tanto, para prevenir la aparición del estreñimiento intentemos introducir los siguientes cambios en nuestra rutina diaria:
- Aumentar el consumo de frutas y verduras.
- Tomar agua, infusiones o caldo, aunque no siempre se tenga sed.
- No posponer las ganas de evacuar.
- Intentar ir al baño cada día a la misma hora.
- Masticar bien la comida.
- Hacer ejercicio al menos tres veces por semana.
Si después de todo ello los síntomas perduran, es hora de acudir al médico.
En resumen, el café despeja la mente y aporta muchos beneficios a nuestra salud. Pero si, además, tomas una taza por la mañana sin leche ni azúcar, estarás contribuyendo a combatir el estreñimiento.
