No cabe duda de que la alimentación y el ejercicio regular son los mejores aliados para perder peso. Comer alimentos bajos en calorías, que eviten carencias nutricionales y que, además, ayuden al organismo a quemar grasas, es imprescindible si quieres deshacerte de esos kilos de más de manera saludable.
Algunas algas marinas encajan muy bien con esta descripción. ¿Cómo actúan y qué ventajas tienen con respecto a otros alimentos? Te animamos a seguir leyendo para descubrirlas.
El poder quemagrasas de las algas marinas
Hoy en día las algas marinas están de moda. De hecho, se anuncian en los medios como complementos naturales de una dieta saludable y por su capacidad para facilitar la pérdida de peso. Veamos cómo lo consiguen:
- El consumo de algas reduce la digestión de las grasas hasta en un 75%.
- No contienen grasas y son hipocalóricas.
- Estimulan la eliminación de residuos y toxinas a nivel del intestino grueso.
- Las algas son ricas en yodo, un mineral necesario para que la tiroides trabaje de forma óptima y favorezca la quema de grasas.
- Producen un efecto saciante, ya que la fibra que contienen aumenta su volumen al entrar en contacto con los líquidos digestivos. De esta manera, se puede controlar el hambre y los impulsos de picar entre horas.
- Regulan los niveles de glucosa en sangre evitando los picos de insulina. Esta hormona es la encargada de eliminar el exceso de azúcar. Lo malo es que, al hacerlo, la acumula en forma de grasa. Por lo tanto, si no quieres aumentar de talla, te interesa mantener los niveles de glucosa estables.
Cuando se planea realizar una dieta de adelgazamiento, uno de los objetivos principales es hacerlo de forma saludable, asegurándose de que obtenemos todos los nutrientes que el organismo necesita para evitar carencias nutricionales y asegurarnos de que nuestra salud no se resiente con los nuevos cambios en la alimentación. Este es otro de los motivos por los que incluir algas marinas en la dieta.De hecho, aunque su composición puede variar ligeramente de una especie a otra, estos organismos poseen, en general, una gran variedad de nutrientes: minerales (calcio, yodo, zinc, potasio, hierro, fósforo, sodio), vitaminas (A, B, C, E), aminoácidos, fibra, proteínas, carbohidratos, ácidos grasos omega 3 y un buen número de antioxidantes. Con todo ello, cada tejido y órgano de nuestro cuerpo sale beneficiado.
Aún así, a pesar de los muchos estudios que afirman que las algas marinas modifican la grasa del organismo y favorecen el descenso de peso, otros no arrojan resultados tan claros sobre el poder quemagrasas de las algas. Son necesarias más investigaciones al respecto. Pero lo que sí parece claro es que la fibra y las proteínas podrían ejercer ese efecto, estas últimas debido a que proporcionan energía y activan el proceso de termogénesis, un mecanismo a través del cual el organismo moviliza los depósitos de grasa.
Algas marinas que ayudan a adelgazar
Existen varios tipos de algas marinas que, por su composición, te pueden ayudar a adelgazar. Lo cual no significa que debas alimentarte solamente de algas, sino que debes incorporarlas a tu dieta de adelgazamiento junto con el resto de alimentos. A continuación te mostramos las cuatro más utilizadas:
1. Kelp
Esta alga contiene un polisacárido llamado alginato, presente en todas las algas pardas y con propiedades gelificantes. Se trata de un compuesto que contribuye a que el organismo absorba menos grasas durante la digestión. Además, evita el estreñimiento, una de las causas de la hinchazón abdominal.
2. Wakame
Es un alga con propiedades diuréticas y desintoxicantes, muy útiles para ayudar a reducir el exceso de sodio y líquido del cuerpo. Estos, a su vez, son otros dos factores que contribuyen a la hinchazón, especialmente en las extremidades y el abdomen.
Por otro lado, y como el resto de algas pardas, contiene un pigmento llamado fucoxantina, que interviene en el metabolismo de las grasas, reduciendo sobre todo la que se acumula a nivel abdominal.
3. Espirulina
El contenido de clorofila de esta alga no sólo aumenta la cantidad de oxígeno en la sangre, sino que también aumenta la cantidad de grasa que el cuerpo es capaz de quemar, especialmente cuando se realiza algún tipo de entrenamiento deportivo.
4. Fucus
Esta alga se utiliza desde hace años como infusión para perder peso gracias a su elevado contenido en mucílagos. Se trata de un compuesto que produce efectos saciantes y laxantes, lo que evita el picoteo y el estreñimiento. Además, acelera el metabolismo, con lo que se produce un mayor gasto energético que podría movilizar las grasas.
Diferentes maneras de preparar algas marinas
Con el fin de que la dieta de adelgazamiento sea variada en lugar de aburrida, te proponemos diferentes maneras de consumirlas al adquirirlas deshidratadas:
Salsas
Después de mantener el alga elegida en remojo durante unos minutos, puedes añadirla a cualquier salsa que estés preparando (mayonesa, vinagreta, pesto…). No solo será un sustituto para la sal, sino que le darás un gusto especial.
Cremas y sopas de verduras
Al incorporar algas a estos platos harán que sean más saciantes y, en el caso de las cremas, incluso más ligeras que si les añadieras nata, quesitos o patata. Un punto a favor si pretendes perder peso.
Legumbres
Añadir algas (y en especial el alga kombu) al agua de cocción de las legumbres o el arroz hace que se ablanden con mayor facilidad y que sean menos indigestas.
Sushi
Si te gusta esta receta japonesa, cuya base es el arroz envuelto en hojas de alga nori, no te prives de prepararla, ya que es un bocado ligero, sin importar que le añadas verduras o pescado.
Ensaladas
Cualquier ensalada ya de por sí es un plato saludable y recomendado en cualquier plan de adelgazamiento. Pero si además le añades algas, estarás aportando un plus de nutrientes que tu cuerpo agradecerá.
Guarnición de carnes y pescados
No dudes en acompañar tu segundo plato con algas en lugar de hacerlo con patatas u otros alimentos más calóricos.
Infusiones
En este caso la reina indiscutible es el alga fucus.
Además de deshidratadas, la mayoría de algas se venden en otros formatos, como pastillas, cápsulas y en polvo. Estos pueden representar una opción a tener en cuenta si quieres aprovechar los beneficios que te pueden aportar las algas marinas, pero no te gusta su sabor o su textura.
Contraindicaciones de las algas marinas para perder peso
Al ser ricas en yodo, deberías abstenerte de comer algas marinas si tienes algún trastorno de tiroides, ya que un exceso de este mineral puede alterar las funciones de la glándula.
Tampoco sería conveniente consumirlas si padeces hipertensión o tienes problemas graves de retención de líquidos. Las algas contienen bastante sodio y podrían agravar la situación impidiendo la correcta eliminación de agua y toxinas.
Por otra parte, si estás tomando algún medicamento, consulta a tu médico antes de consumir ciertas algas porque los mucílagos pueden dificultar la absorción de algunos fármacos.
En resumen, si sigues una dieta para perder peso no dudes en introducir las algas en tu alimentación y aprovechar los muchos beneficios y propiedades que proporcionan.
